Alemania 0 - 1 Serbia

Ayer llegó la mala noticia para Francia cuando México le sacaba los colores con dos goles que lo dejaba practicamente fuera del mundial. Hoy le tocó el turno a Alemania, que si bien aún tiene opciones de conseguir la clasificación para la siguiente fase (puede ser el primer grupo con 4 empates a 3 puntos), el gol de Serbia ha demostrado que la primera selección en golear en este mundial no está tan fuerte como se la veía en su primera aparición.


Contra todo pronóstico, Serbia se sacó un AS de la manga y, a pesar de que Alemania tuvo todo a su favor, incluído un penalty fallado por Podolski, acabó llevandose los tres puntos en un partido muy intenso con ocasiones por ambas partes. Al final, el serbio Jovanovic se convirtió en la antítesis de un Podolski que lo tuvo todo para marcar, pero que no tuvo la precisión que ya había demostrado en otras ocasiones.

Al iniciar el partido, los serbios toman el control del balón y demuestran que la imagen dada ante Ghana en el primer partido no tiene nada que ver con las posibilidades del equipo. Ya en el primer minuto había avisado Jovanovic de cabeza, habilitado por el gigante Zigic. Alemania no tardó mucho en responder, y a los dos minutos Khedira veía como se marchaba su volea por encima del travesaño serbio.

Alemania toma el control del encuentro, atacando con organización y con buenas maneras. Mientras, Serbia se echa arriba con más corazón que cabeza, pero eso mismo los hace peligrosos. Al poco de sobreponerse del susto de Khedira, Podolski perdona en la primera de las que tuvo en toda la mañana, sacandose un disparo que roza lamentablemente el palo de Stojkovic.

Comienza así el recital de nuestro amigo Undiano. El colegiado abrió la veda, y las tarjetas amarillas cogían aire en la mano del español, pasando más tiempo ante los ojos de los jugadores, que en el propio bolsillo del árbitro. En poco más de veinte minutos, el colegiado ya había mostrado cinco tarjetas amarillas. El español, que acabó siendo muy criticado por las tarjetas mostradas, siguió perfectamente el guión que tenía preparado la federación, al comunicar a todos los colegiados que cualquier falta por detrás, o merecedora de cartulina, deberá ser sancionada como tal, siendo indiferente el minuto de juego. Parece que intentan proteger a los jugadores que quieren jugar, y fomentar así el espectáculo del fútbol. Sin embargo, lejos de favorecerlo, han dejado a Klose sin tercer, último y decisivo partido de la fase de grupos, con lo que no acaba de entenderse esto de proteger a los "buenos" jugadores. Por último, y para zanjar el tema, decir que Undiano Mallenco no ha arbitrado mal el encuentro, al contrario, lo ha hecho perfectamente, y que los que están equivocados son los de la federación al pedirle a los colegiados que sean menos permisivos... más que nada, porque Iniesta aún se está recuperando de la paliza que le dio Suiza, mientras el colegiado inglés miraba para otro lado.

Dicho esto, y siguiendo el guión ordenado por los superiores, Undiano muestra la segunda cartulina amarilla a Klose en el minuto 35. Los alemanes, aún boquiabiertos, no aciertan a despejar un balón que acaba en el fondo de las mallas alemanas. Para darse cuenta del estado de embriaguez alemán, hay que tener en cuenta el transcurso de la jugada, y es que Krasic se adelanta por la derecha, llegando a la línea de fondo, y al levantar la cabeza, atisba a un descomunal Zigic que sobresale dos cabezas por encima del defensa alemán. Krasic, centra así el primer balón desde la derecha, al costado izquierdo del área germana. El gigantón, se eleva más que su par, y golpea el jabulani hacia la posición de Jovanovic. Jovanovic, totalmente solo, controla el balón con el pecho, y mientras comienza a bajar, contacta con el para dejarlo dentro de la portería alemana. Para entonces, Alemania comenzaba a darse cuenta de que Undiano acababa de enviar a Klose a los vestuarios. En fin, todo un cúmulo de despropositos los de la defensa germana ante la incredulidad de lo que estaba sucediendo.

A raíz del gol, Serbia hace toda una demostración defensiva, con la dirección del ya conocido Antic desde el banquillo, un viejo atletico que dio a los rojiblancos el sabor de un doblete con los característicos contraataques de la época (gracias señor Radomir). Alemania atacaba con todo, y Serbia se convertía en un muro infranqueable. Entonces, antes de llegar al descanso, Khedira hace temblar la portería con un violento disparo al travesaño serbio.

Con la última ocasión alemana, se llega al descanso. Low debe rehacer al equipo, que ha sufrido un duro golpe con la expulsión de Klose, aunque teniendo en cuenta el desarrollo del encuentro, parece que ya lo ha hecho. Por su parte, Antic lo tiene todo de cara, y le basta con esperar atras y salir al contragolpe... que de eso sabe un rato.

Al iniciar la segunda mitad, Alemania busca el empate. Podolski vuelve a fallar una clara ocasión, enviando el balón fuera. La siguiente oportunidad le toca a Ozil, que también la echa fuera. Alemania aprieta, pero no encuentra el hueco. Y de repente, haciendo un poco de memoria, llega a las retinas de los espectadores un penalty provocado por Kuzmanovic, al tocar el balón con la mano cuando no tenía ningún sentido, convirtiendose así en el centro de todas las miradas. Y es que esta vez le tocó el turno al central Vidic, que vuelve a meter la mano sin ninguna lógica comprensible. El penalty señalado, lo lanza Podolski para resarcirse de los errores anteriores. Sin embargo, lejos de conseguirlo, falla el lanzamiento, convirtiendo el partido en una auténtica pesadilla con el alemán como el "tío" de las cuchillas en las manos (vease Eduardo Manostijeras y no Freddy Krueger, porque esta noche no daba ningún miedo el extremo izquierdo).

Dejando atrás el penalty, destaca un disparo a la madera del serbio Jovanovic, que a punto está de decidir el partido. Y poco después, un cabezazo de Zigic al travesaño de la portería alemana hace temblar los cimientos de las esperanzas germanas por conseguir el empate. Pero no se vienen abajo, y comienza la recta final con mucha tensión para ambos equipos. Los alemanes quieren sacar algo, aunque sólo sea un punto, y Serbia quiere mantener el resultado, sin olvidarse de aumentar la ventaja a la "contra".

Con ocasiones por uno y por otro lado, se llega al final del encuentro, y nos deja un triple empate entre Alemania, Serbia y Ghana. En un segundo plano queda Australia, que aún no ha conseguido puntuar en el campeonato. Ahora, los alemanes parten con la ventaja de los 4 goles convertidos en el primer partido como billete para octavos en el caso de un empate a puntos, asegurandose así la primera plaza en el caso de conseguir la victoria en el último partido de la fase de grupos. Aunque mañana veremos si Australia no decide empatar con el resto de equipos, y provoca un empate entre los cuatro equipos del grupo.


Estadio: Nelson Mandela Stadium (Puerto Elizabeth)
Capacidad: 48.000 personas
Asitencia: 40.000 personas

ALINEACIÓN:
Alemania
POR - Neuer
DFC - Friedrich
DFC - Mertesacker
LTI - Badstuber
LTD - Lahm
MEC - Scheweinsteiger
MEC - Khedira
EXI - Podolski
EXD - Muller
MPC - Ozil
DLC - Klose
Serbia
POR - Stojkovic
DFC - Subotic
DFC - Vidic
LTI - Kolarov
LTD - Ivanovic
MDF - Kuzmanovic
MEC - Stankovic
MEC - Ninkovic
EXI - Jovanovic
EXD - Krasic
DLC - Zigic

GOLES:
Jovanovic (min. 38) Alemania 0 - 1 Serbia