Grupo B

Lo prometido es deuda... ayer presentaba el grupo A, y hoy, hacemos lo propio con el grupo B. A falta de 10 días para el inicio de la competición, ya empiezan a caer los pedazos de uñas, empiezan a salir del armario las bufandas y las camisas de los equipos, empiezan a rodarse los sillones para buscar el mejor ángulo a la hora de dar el salto mortal, sin tirar ni la cerveza, ni las pipas, ni el bol de palomitas (o las cotufas... según vuestro lugar de procedencia).

Empecemos pues:

Grupo B

Llega Dios al frente de la albiceleste. Nadie apuesta por ellos como finalistas, pero para eso están los milagros. Y sin ir más lejos, los apóstoles del todopoderoso han hecho los deberes, y se han convertido en Messi, Agüero, Higuaín y Diego Milito, dejando apartado a Tévez en el papel de Judas, pero sin olvidar a Palermo. Y ojo, que no solo delanteros tiene argentina...

Por cierto, más de uno querrá ver a los argentinos celebrando el triunfo... y no solo por ver a Don Diego Armando en "bolas" celebrando el título en el obelísco, sino por la modelo Luciana Salazar, que se unirá al "pelusa" en dicha causa.

Llegan pisando flojo... pero tras la medalla de plata conseguida en los Juegos Olimpicos del 2008, tienen un subidón importante. Aún así, el cambio de entrenador a cuatro meses del Mundial no parece haber sido una jugada inteligente.

Lars Lägerback (he tenido que leerlo tres veces para poder escribirlo) tendrá que hacerse con el control de la selección para intentar conseguir lo imposible.

Echando un vistazo a la alineación de los orientales, se me hace difícil destacar a uno... más que nada porque parece que estoy viendo la misma foto pero desde otro ángulo. A parte de eso, debe tenerse en cuenta la grandeza de esta selección, ya que tras pasar por la fase de clasificación con total superioridad, ganando todos sus partidos, intentarán repetir su anterior proeza: las semifinales del 2002.

Huh Jung-Moo, el heroe coreando (como jugador), será el encargado de mostrar al mundo la potencia de Corea del Sur.

Con suerte, veremos el fútbol de verdad, y no el de Al-Ghandour... con esas lineas de fondo al más puro estilo zig-zag.

Después de la Eurocopa de Portugal que se llevaron con el antifutbol, dan más miedo por su físico que por su espectáculo. Gekas, el único que llega con ganas de jugar, amenaza siendo el máximo goleador de la fase de clasificación. Con suerte, para el mundial, decidan cambiar los esquemas y comiencen a jugar el fútbol.

Otto Rehhagel sigue contando con la confianza de todos los griegos, y quiere borrar la imagen dada en el Mundial de Alemania 2006.